Un total de 197 personas murieron en 2017 defendiendo el medio ambiente, y muchas más sufrieron amenazas, acoso e intimidaciones, denunció el Programa de la ONU para el Medio Ambiente en la presentación de una iniciativa para proteger y promover los derechos medioambientales.
El PNUMA citó un estudio de la plataforma Global Witness que recoge que casi cuatro personas murieron semanalmente en 2017 defendiendo un medio ambiente limpio y saludable. Además, entre el 40 % y el 50 % de los fallecidos ese año eran originarios de comunidades locales o indígenas.
El informe también reveló que entre 2002 y 2013, 908 individuos de 35 países fueron asesinados defendiendo el medio ambiente y que, entre 1993 y 2016, 48 países promulgaron leyes para restringir las actividades de organizaciones no gubernamentales locales, mientras que 63 Estados limitaron la acción de ONG extranjeras.
Según el PNUMA, desde la década de 1970 los derechos medioambientales evolucionaron más rápido que cualesquiera otros de los derechos humanos y, cada vez más, tales derechos son invocados y defendidos. En este sentido, el PNUMA recordó que tribunales de 44 países han emitido decisiones para hacer cumplir el derecho constitucional a un medio ambiente saludable, ya que es un derecho contemplado en más de 100 Constituciones en el mundo.
‘Aquellos que luchan para proteger el planeta deberían ser tratados como héroes, aunque lamentablemente muchos pagan un precio muy elevado con su seguridad y, a veces, con sus vidas’, sostuvo en el comunicado el director del PNMA, Erik Solheim.