Sobre las orillas del Río Salado de Junín apareció un gran colmillo de un Notiomastodon, dentro del barro, casi cubierto por las aguas limosas. Se trata de una pieza fósil en extremo importante, un fragmento de defensa de un animal ya extinto, muy parecido al elefante actual.
Es un género de proboscídeos extinto, de América del sur que vivió durante el Pleistoceno tardío entre 1800 a 780 mil años. Su género está clasificado dentro de la familia gonfotéridos con una medida de más de 2 metros y 4 toneladas.
Su dieta estaba conformada por hierba según sus fijaciones de carbono C3 y C4 y debió compartir su territorio con una gran variedad de fauna como su pariente Haplomastodon y otros como los megaterios y gliptodontes.
Cabe destacar que durante el último día de 2017, en vísperas de año nuevo, sobre las orillas del Río aparecieron unos restos bastante destruidos y molares dentro del fango del mismo animal “bebé”.
Si bien en un principio el elefante de las pampas estaba clasificado entre Stegomastodon y Notiomastodon, ahora se conoce con el último nombre mencionado anteriormente.