El gobierno de Uruguay envió al Parlamento un proyecto de ley para prohibir las carreras de perros, cualquiera sea su raza, en el marco de ‘una política de protección de la vida y el bienestar de los animales, así como de una tenencia responsable’.
La iniciativa fue de organizaciones protectoras de animales, según indicó Presidencia de la República en su página web, y va en consecuencia con la ‘tendencia mundial’, ya que ‘son pocos los países que permiten esta actividad’.
Según la exposición de motivos, las carreras de perros se desarrollan ‘en el marco de la ilegalidad’, provocando ‘el sufrimiento de los animales’ y la promoción de ‘apuestas clandestinas’.
Se alerta que los perros ‘son sometidos a un entrenamiento feroz, que incluye la utilización de drogas y esteroides, y que terminan en el abandono o la muerte cuando los resultados en la competencia no son los esperados por sus tenedores’.
Además, la Secretaría Nacional de Deportes ‘determinó que las carreras de perros no son una práctica deportiva, ya que uno de los elementos que determinan que lo sean es que tenga como protagonista al ser humano, aunque sea como conductor de un animal, lo cual, en este caso, no se cumple’.
En Uruguay, según datos de la Asociación Uruguaya de Galgueros Unidos, hay entre 3 mil y 4 mil galgos que se utilizan para las carreras en Maldonado, Canelones, Colonia, Florida, Río Negro, San José y Soriano.