Una huerta en casa te permite tener el control sobre los alimentos que consume tu familia

Más leídas

Desde una jardinera en una terraza hasta una parcela, cualquier espacio es bueno para tener un huerto propio y cultivar en ecológico, una práctica cada vez más extendida entre aquellos que necesitan o desean tener el control de lo que consumen.

Tan sólo hay que ser consciente del espacio y de lo que en él se puede cultivar y tener en cuenta la luz del sol -que ha de llegar a la planta en su estadio de crecimiento-, el grado de humedad, una tierra rica en nutrientes y la semilla apropiada a cada época del año.

Y si la finalidad es cultivar en ecológico, atender a un principio fundamental, el de evitar cualquier producto químico, porque “hay alternativas, y todas las plagas y enfermedades de la planta se pueden combatir con remedios.

Puedes cultivar más de 1.150 kilos de verduras

En apenas 152 metros cuadrados es posible cultivar más de 1.150 kilos de verduras. Esta cifra representa cuánto puede ahorrar una familia al producir sus propios alimentos con una huerta agroecológica. Así lo afirmó un estudio del ProHuerta, el programa del Ministerio de Desarrollo Social y del INTA, llevado a cabo durante dos años por especialistas del instituto en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

“Bien manejadas, las huertas tienen un rinde bastante estable”, dijo Francisco Pescio, coordinador del ProHuerta en la región AMBA-Delta, quien precisó que, en la superficie estudiada –propia de zonas periurbanas y rurales, antes que urbanas–, se logró una productividad de 7,5 kilos de hortalizas por metro cuadrado.

El ahorro alcanzado es significativo, en particular, para el público objetivo del ProHuerta: “El programa está pensado especialmente para familias en situación de vulnerabilidad, que a veces no pueden comprar verduras, y en este sentido, es importante que puedan producir alimentos saludables y nutritivos para su autoconsumo”. Además, señaló el extensionista, los huerteros suelen compartir su cosecha con otros familiares y vecinos y, eventualmente, es posible que comercialicen los excedentes.

Acercar la horticultura a todos los públicos

Carlos Calvo es un empresario enamorado de la agricultura ecológica y en especial de los huertos urbanos, una manera de “acercar esta actividad a todo aquel que quiera cultivar sus propios productos en poco espacio”.

Junto a su compañero Juanjo Sánchez crearon ‘La Caja de Semillas’, un proyecto de iniciación al cultivo ecológico destinado a niños y mayores que pone a su disposición todas las herramientas necesarias para diseñar un huerto urbano con vocación didáctica.

“Existen otros productos similares en el mercado, pero se quedan en la venta de la semillas”, ha relatado; “nosotros hemos querido ir más allá y hemos creado una web que es una escuela de cultivo online”, en la que el usuario aprende lo que es un huerto urbano y se forma en agricultura ecológica.

Un huerto en cualquier espacio

Originariamente, un huerto urbano era un área no cultivada que ayuntamientos o particulares ponían a disposición del interesado para autoabastecerse de productos propios de huerta a cambio de un alquiler.

Sin embargo, el concepto ha evolucionado y hoy día “vale cualquier espacio”, y hay personas capaces de obtener productos de calidad bajo los principios de la agricultura sostenible en una simple jardinera en una terraza, ha reconocido Calvo.

La ‘Caja de Semillas’ oferta tres modelos diferentes, uno para terraza, otro para jardín y otro para huerta, e incluye distintas variedades de semilla de hortalizas, frutas o verduras, recipientes, herramientas, tierra, abono y una guía orientativa.

Se trata de productos orgánicos, reciclables y biodegradables; “queremos que nuestro impacto en la naturaleza sea mínimo y convertir a las personas en amantes de la agricultura y el cultivo con métodos sostenibles”, ha asegurado.

Un vínculo emocional

“Nos motiva ser capaces de crear vínculos emocionales entre las personas y la naturaleza y de transmitir la ilusión que tenemos nosotros”, ha señalado, y, “aunque no damos servicio de asesoramiento propiamente dicho, sí nos gusta resolver cualquier tipo de duda o curiosidad”.

Para Carlos Calvo, “las cosas son cíclicas, siempre ha habido huertos y estamos volviendo a eso, la gente se está cansando de comprar en grandes superficies y está volviendo a la idea de autoabastecerse, gastar menos dinero y saber que lo que come es más sano”.

Con un huerto propio “eres capaz de controlar todo el proceso”, ha insistido, y el esfuerzo tiene una recompensa; “no es lo mismo comerse una ensalada con lo que tú has cultivado que consumir una envasada, no hay color”, ha asegurado.

Carlos Calvo ha recordado que un buen agricultor ecológico no debe usar nunca productos químicos o que no sean naturales, porque existe alternativa para todo.

Por ejemplo, la tierra ideal es la compuesta por humus de lombriz y turba rubia, un buen método para combatir los hongos es aplicar yogur con agua a la planta y para ahuyentar a los caracoles lo mejor es esparcir junto a la planta trozos de cáscara de huevo.

Para todos los públicos
La web, activa desde hace dos meses, ha recibido visitas de personas “de todos los perfiles”, desde jóvenes hasta abuelos jubilados con necesidad de ocupar su tiempo o gente que de esta manera recuerda su juventud en el pueblo.

Por eso, ‘La Caja de Semillas’ trabaja ya en nuevos productos, con más variedades de semillas, orientadas a usos culinarios o medicinales, y un kit especial para niños.

Últimas noticias

Fuertes críticas al borrador de la COP29: el principal cuestionamiento

Se presentó el borrador de la COP29 y recibió fuertes críticas de múltiples países debido a que se omite la cifra de financiamiento

Noticias relacionadas