Las tres islas que emergieron en los Ćŗltimos 30 aƱos en el norte del Gran Buenos Aires tuvieron un crecimiento mĆ”s prematuro al esperado y se prevĆ© que dentro de 40 aƱos todo el partido de San Isidro tenga una nueva fisiologĆa frente a su costa.
De acuerdo a informaciĆ³n de la Municipalidad de esa ciudad, las denominadas āIslas Distintasā estĆ”n creciendo a un promedio anual de 100 metros. Se trata de un espacio en el que se preservarĆ” la biodiversidad y donde estĆ” prohibido cualquier tipo de construcciĆ³n.
Los expertos consultados por las autoridades locales consideraban que el crecimiento de estas islas iba a ocurrir dentro de 100 aƱos. Pero poco mĆ”s de dos dĆ©cadas, desde finales de los ā90, se produjo el crecimiento de las tres superficies ubicadas sobre la costa del RĆo de la Plata.
En la actualidad, las Islas suman un total de 180 hectĆ”reas y todo su ecosistema estĆ” protegido como reserva natural. Entre algunas de las especies mĆ”s destacadas de la fauna existente se encuentran los reptiles, carpinchos, coipos, anfibios y aves como el chajĆ”, cisnes, patos, gaviotas y cigĆ¼eƱas.
Las tres islas fueron denominadas āIslas Distintasā luego de una iniciativa realizada entre diferentes colegios de la zona. Se les pidiĆ³ a los alumnos que propusieran nombres para las mismas. El nombre del conjunto de Islas fue una propuesta de la Escuela de EducaciĆ³n Secundaria NĀŗ 1. En tanto, la isla norte fue bautizada como āLa Esperadaā, por sugerencia del Colegio Leonardo Da Vinci de Boulogne, segundo aƱo B. La del centro serĆ” conocida como āLa Esperanzaā, a partir de otro curso del Colegio Leonardo Da Vinci. Finalmente, la isla sur que apareciĆ³ a principios de este aƱo, se conoce como āJuncalā. Fue elegido por la Escuela Secundaria Municipal Malvinas Argentinas de Beccar, cuarto aƱo A, y el Colegio de Todos los Santos de Boulogne, 5Āŗ B.
La ciudad cuenta con 6 km de costa. Por ende, la cobertura que de a poco van ganando las tres islas en la superficie costera se empezaron a unir con la zona ya ocupada por las Islas del Delta, que ya ocupan la totalidad de la costa de la ciudad de Beccar.
La primera de las tres islas en emerger fue āLa Esperadaā, que saliĆ³ a la superficie a mediados de la dĆ©cada del 90. Su vegetaciĆ³n estĆ” compuesta por distintas especies de Ć”rboles, entre la que se destaca el sauce.
En la reserva ya se empezĆ³ a percibir la ayuda de estas islas y del cuidado sobre las mismas en la flora y la fauna de las mismas. AsĆ, se produjo la protecciĆ³n de animales en peligro de extinciĆ³n, como el lobito de rĆo, cuyos ejemplares volvieron a nadar en las aguas del rĆo.
āDesde hace aƱos, controlamos que no haya usurpaciones, depredaciones ni pesca en el nuevo Delta de la zona norte. En un tiempo , estas islas podrĆ”n ser visitadas como reserva natural por vecinos y turistasā, seƱalĆ³ Gustavo Posse, intendente de San Isidro.
Para conocer cĆ³mo las islas fueron declaradas como reserva natural, hay que remontarse al 1996, cuando en San Isidro se impulsĆ³ una ley que logrĆ³ establecer los nuevos lĆmites del Partido que incluĆa a los territorios que se formaran en el RĆo de La Plata. En ese momento se estableciĆ³ que cada territorio nuevo se encontrarĆa bajo la jurisdicciĆ³n de cada Municipio. Al proyecto adhirieron en su momento los intendentes de Tigre, San Fernando y Vicente LĆ³pez. El objetivo principal en su momento era que no se realicen usurpaciones en las tierras de esas islas.
Uno de los objetivos de los especialistas es que las islas puedan conservar sus humedales de manera natural. Al tratarse de una reserva natural, se pretende que la superficie actĆŗe como esponja y asĆ se puedan amortiguar los efectos de la lluvia en la zona.
Las tres Islas Distintas se formaron en la confluencia del canal San Antonio y LujĆ”n, en el RĆo de la Plata.