Hans-Olof Nilsson ha diseñado e instalado un sistema de energía único en su casa a las afueras de Gotemburgo. Allí él y su esposa viven desconectados de la red eléctrica comercial.
Instaló paneles solares fotovoltaicos, colectores solares, baterías, pilas de combustible y almacenamiento de hidrógeno en su villa de Angered, Gotemburgo. Le movió el deseo de ser autosuficiente en cuanto a la electricidad y la calefacción, en una casa moderna. Pero no es fácil encontrar la rentabilidad.
Buscar el desarrollo sostenible no es cuestión de edad. En los suburbios de Gotemburgo, Hans Olof Nilsson, un ingeniero jubilado sueco de 65 años, ha construido la primera casa del mundo completamente autosuficiente que funciona con energía solar e hidrógeno.
El futuro de la vivienda está en Suecia
En Gotemburgo, el ingeniero industrial Hans Olof Nilsson ha creado la primera casa totalmente autónoma del mundo con hidrógeno y energía solar.
El suministro de electricidad está garantizado por paneles solares y pilas de combustible de hidrógeno. Estos garantizan un acceso totalmente independiente a la electricidad durante todo el año. El diseño se compone de 160 m² de paneles fotovoltaicos.
Converte el excedente de electricidad producido en hidrógeno
Hans ha instalado un electrolizador que le permite convertir el excedente de electricidad producido en hidrógeno, que luego se puede transformar en electricidad a través de pilas de combustible. Estas son más eficientes que las baterías convencionales, permiten un almacenamiento de energía más sostenible.
Además de ser totalmente autosuficiente en energía, la casa de Nilson tiene la distinción de tener una tecnología única capaz de calibrar automáticamente la temperatura en el interior. Al optar por esta solución, el inventor busca más para ahorrar energía.
Una smart-grid inspiradora
“La diferencia es que me pago a mí mismo. Además, la planta suministra calefacción, agua caliente y carga del coche eléctrico”, dice Hans-Olof Nilsson.
Su casa lleva desconectada de la red desde marzo de 2015. Las autoridades suecas quedaron impresionadas por el ingenio de este sistema.
En 2017, el municipio de Vågårda decidió recurrir a la experiencia de Hans Olof Nilsson para renovar 172 viviendas sociales. El ayuntamiento quiere utilizar en estas viviendas la misma tecnología que en la casa Nilsson.