En un esfuerzo por reducir los impactos ambientales y sanitarios del mercurio, América Latina lanzó una iniciativa clave para mejorar la regulación del comercio de este metal tóxico. Bajo el nombre Acelerar el cumplimiento del Convenio de Minamata a través de una mejor comprensión y control del comercio de mercurio en América Latina, este proyecto busca evitar que aproximadamente 176 toneladas métricas de mercurio ingresen al mercado internacional, mitigando así sus efectos nocivos.
La iniciativa, presentada recientemente en Bogotá, fortalecerá la cooperación regional para regular los flujos comerciales del mercurio y apoyar a los países participantes en el cumplimiento de sus compromisos adquiridos en el Convenio de Minamata. “Este tratado global es esencial para proteger la salud humana y el medio ambiente de los efectos nocivos del mercurio”, declaró Jordi Pon, representante del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Un paso hacia una economía más limpia
El proyecto, financiado con tres millones de dólares por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial y con el apoyo de socios internacionales, busca reforzar los marcos nacionales y regionales para la regulación del comercio de mercurio. Entre sus objetivos principales destacan:
- Evaluar los mecanismos existentes de vigilancia del comercio y desarrollar una base de datos exhaustiva.
- Apoyar la elaboración y adaptación de legislaciones nacionales para rastrear y regular el comercio de mercurio.
- Impulsar estrategias para combatir el comercio ilegal de este metal.
- Capacitar a funcionarios de comercio, aduanas y control de fronteras para garantizar una aplicación eficaz de las normativas.
Riesgos y soluciones
Desde 2018, la falta de control sobre el comercio de mercurio en la región agravó los riesgos ambientales y sanitarios. Su uso en la minería artesanal y de pequeña escala generó emisiones peligrosas que afectan tanto a los ecosistemas como a las comunidades cercanas.
La iniciativa también fomentará la creación de una plataforma regional de intercambio de información sobre el comercio de mercurio, con el fin de mejorar la transparencia y eficiencia en la gestión de este recurso.
Con este proyecto, América Latina da un paso firme hacia una economía más sostenible, reduciendo la circulación de mercurio y minimizando sus efectos perjudiciales para el medio ambiente y la salud pública.
¿Para qué se utiliza el mercurio en la vida cotidiana y cuál es su impacto ambiental?
El mercurio se utiliza en algunos productos de uso cotidiano, como termómetros, bombillas fluorescentes, y amalgamas dentales. Sin embargo, su uso está disminuyendo y en algunos países está prohibido. El mercurio se puede encontrar en:
- Termómetros, barómetros, higrómetros y manómetros
- Interruptores y relés eléctricos
- Bombillas fluorescentes
- Amalgamas dentales
- Productos para aclarar la piel y otros cosméticos
- Productos farmacéuticos
Impacto ambiental
- El mercurio contamina el agua y las plantas
- Puede generar graves problemas de salud, como problemas neurológicos y de teratogénesis
- Interfiere en el comportamiento normal de los organismos y en su capacidad de reproducción
- Puede transformarse en especies más tóxicas
- Puede ingresar a la cadena trófica y llegar al hombre
Fuentes de contaminación
- La quema de combustibles sólidos, como el carbón, el lignito, la turba y la madera
- Extracción de oro a pequeña escala
- Minería
Alternativas al mercurio
- Bombillas de diodos emisores de luz (LED)
- Bombilla de luminiscencia estimulada por electrones
Fuente: ONU.
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