El oso panda gigante es una especie en peligro de extinción que encabeza la lista de animales protegidos en China. Es rara su caza ilegal, pero se cree que sus partes se venden a precios elevados en el mercado negro debido a su escasez.
La policía forestal de la provincia de Yunan recuperó piel, carne, huesos y un órgano interno del animal en manos de los cazadores y vendedores. De ser condenados, podrían ser sentenciados a varios años de prisión.
Un censo reciente revela que la población de pandas silvestres creció en 268 a un total de 1.864 en China desde el recuento anterior del 2003.
La organización World Wild Fund for Nature advirtió que la caza ilegal de los osos panda declinó pero que el desarrollo económico redujo su hábitat natural.
De todos modos las autoridades afirman que sigue siendo un problema la caza furtiva y el contrabando de sus partes y que se intensificará la lucha contra los actos en perjuicio de las especies en peligro.