Un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad de Oxford y la Universidad de Minnesota encontró que la carne roja es aproximadamente 35 veces más dañina que un plato de verduras. La investigación concluyó que una porción de carne genera 20 veces más emisiones de gases de efecto invernadero que una porción de vegetales.
Michael Clark, uno de los investigadores principales indicó a The Guardian que reemplazar la carne con alimentos a base de plantas generaría grandes beneficios ambientales:
Elegir una alimentación más sostenible es una de las principales formas en que las personas pueden mejorar su salud y ayudar a proteger el ambiente.
El estudio también señala una importante relación entre la salud de las personas y el planeta. Los mismos alimentos que son mejores para el ambiente también son los mejores para la salud humana.