Tras los ataques registrados en varias playas del río Paraná por parte de palometas, una playa misionera debió ser evacuada por mordidas sufridas por parte de tarariras.
Los ataques de tararira se produjeron en las últimas horas en las playas de la localidad de Garupá, en las inmediaciones de la ciudad de Posadas.
Al menos dos adultos y una menor sufrieron mordeduras, por lo que se decidió evacuar el balneario de esa localidad situada a unos 16,5 kilómetros de la capital misionera.
El episodio fue confirmado por el secretario de Gobierno del Municipio de Guarupá, José Peralta.
‘No son ataques por hambre y por voracidad, sino por las altas temperaturas. Nosotros tomamos las medidas necesarias para prevenir. Se hizo una evacuación preventiva el sábado. Hay mucha gente que va al balneario, incluso turistas’, explicó el funcionario al sitio Misionesonline.net.
Si bien posteriormente las playas fueron limpiadas, se recomendaba a los bañistas mantenerse alejados de los camalotes, donde los peces se agrupan.
La tararira, una especie de amplia distribución por los ríos americanos desde México hasta la cuenca del Plata, es apreciada en la pesca por su voracidad para atacar los cebos, con ejemplares que pueden llegar a pesar por encima de los cuatro kilos.
En las últimas semanas fue la palometa la protagonista de ataques, algunos de ellos de carácter bastante serio, contra bañistas que acudieron a las playas fluviales, ante la persistente ola de calor que afectó a gran parte del país durante diciembre pasado.
La zona en la que se registraron más ataques es la la ciudad de Rosario, donde un total de 60 personas fueron mordidas en una playa del norte de Rosario, mientras que llegaron a reportarse ataques de ese voraz pez en la localidad bonaerense de Vicente López.