Causó polémica entre los grupos conservacionistas la llegada de un cargamento con seis elefantes a la ciudad de Hangzhou en China provenientes de Zimbabwe. Esto forma parte de una compra efectuada por el país asiático que tiene como fin exhibir a estos animales en distintos zoológicos. La transacción también considera otros 29 ejemplares que deberían llegar a su destino en los próximos días.
Este hecho ha causado indignación entre distintas organizaciones animalistas quienes critican y cuestionan la adecuación de las condiciones de transporte y la ética de ese tipo de transacciones comerciales.
Las reacciones han motivado una respuesta por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores de China. ‘Antes de transportar estos elefantes a China, los departamentos adecuados de Zimbabue, expertos en fauna y grupos conservacionistas han evaluado los parques y las condiciones de vida de los elefantes en China’, señaló Hua Chunying, portavoz de la cartera.
Respecto a las críticas recibidas, desde el gobierno chino respondieron: ‘Esto es un comportamiento comercial normal y ocurre de acuerdo con las convenciones internacionales importantes y las leyes domésticas. No atañe a ningún otro país ni a particulares’, agregó Hua Chunying.
Según la Radio Nacional de China, los primeros elefantes que llegaron pasarán por una fase de adaptación y no serán expuestos a la vista del público hasta la próxima primavera.