Personal de la Policía Caminera de la provincia de Córdoba detuvo en la localidad de Alicia a un joven de 26 años que transportaba 146 loros habladores en el baúl de su auto, donde además llevaba otras aves.
El procedimiento se llevó a cabo pasada la medianoche en el kilómetro 133 de la ruta 13, donde se interceptó a un Chevrolet Aveo que transportaba en el baúl a los loros.
Dentro del vehículo el joven años trasladaba también dos gallinas japonesas, cinco pininas, 50 calafates y siete guineas.
La aves fueron secuestradas y el joven fue trasladado a una sede policial por transporte ilegal de piezas provenientes de la caza furtiva o depredación.
No es la primera vez que se descubre un ilícito similar con loros, ya que lo mismo ocurrió en Santiago del Estero y, el pasado 21 de diciembre, en el baúl de un auto encontraron 210 loros.
En un operativo de rutina realizado por Gendarmería Nacional se procedió al secuestro de 216 loros que eran llevados en el baúl de un auto, desde esta provincia, con destino a Santa Fe. El hallazgo fue a la altura de la ciudad de Pinto, a 246 kilómetros de la capital santiagueña, sobre la Ruta Nacional 34. Las aves fueron entregadas a la Dirección de Bosques y Fauna de la Provincia.
Era cerca del mediodía, con una sensación térmica que superaba los 40 grados sobre la ruta, cuando el personal de Gendarmería detuvo el andar de un automóvil Renault Fluence, en el que viajaban dos hombres quienes ante las preguntas de rigor mantenían el volumen del sistema de audio del auto muy alto, hecho que llamo la atención a los gendarmes.
Luego de varios pedidos para que bajen el volumen finalmente lo hicieron y los uniformados empezaron a sentir ruidos extraños que salían de la parte de atrás del automóvil, por lo que les ordenaron salir del auto y abrir el baúl. Al hacerlo, los numerarios de Gendarmería se encontraron con que en el interior del mismo había una enorme cantidad de loros, que eran transportados de contrabando hacia la provincia de Santa Fe.
Al realizarse el conteo se determinó que se trataba de 216 “loros habladores”, de la especie amazonas aestiva, en clara violación a la Ley 4.802 de Conservación de la Fauna Silvestre. Quienes iban en el auto dijeron que venían de la localidad de Pampa de los Guanacos, en el interior Santiagueño, y que se dirigían a San Lorenzo, provincia de Santa Fe. La fiscalía Añatuya ordenó las actuaciones de rigor, el secuestro de las aves y que los ocupantes continúen en libertad quedando vinculados a la causa.
No es la primera vez que Gendarmería Nacional realiza este tipo de hallazgos en las rutas santiagueñas. Previo a las restricciones de circulación por la pandemia del coronavirus se secuestraron tortugas, pájaros y hasta catas que habían sido pintadas para disimular su edad y poder ser vendidas como “pichonas”. Los loros fueron entregados en el destacamento forestal de “Ojo de Agua” al personal de fauna y bosques provincial.