Este reptil conocida como “serpiente arcoíris” fue vista recientemente en el bosque nacional de Ocala, Estados Unidos, por dos mujeres que caminaban por la zona. La belleza única de los colores de su piel cautivan a cualquiera que la observe, de hecho es tan extraña que la última vez que fue vista en la naturaleza fue en 1969.
Esta especie es endémica de las llanuras costeras del sudeste de Estados Unidos y solo se encuentra en esta zona. La serpiente arcoíris no es venenosa y su desaparición no tiene algo que ver con estar en peligro de extinción, que no sea vista se debe a que es un animal que vive en grietas y excavaciones cerca de lagos, arroyos y pantanos. Su dieta se basa en anguilas, ranas y anfibios.
Por lo general, mide entre 90 y 120 cm, sin embargo, hay casos en los que ejemplares han alcanzado los 168 cm. La reaparición de este animal en la naturaleza es una excelente noticia para todos, la gente lo ha estado esperando durante cinco décadas.