Los representantes de 170 países y numerosas organizaciones de conservación, entre ellas WWF, han debatido durante 10 días sobre un gran número de propuestas relacionadas con el comercio sostenible de vida salvaje y han tomado importantes decisiones para el futuro de miles de especies animales y vegetales en todo el mundo.
Los elefantes fueron el foco de atención principal de la reunión y el objeto de muchas de las decisiones. Entre ellas, los gobiernos votaron por mantener la prohibición existente de comerciar con marfil a nivel global.
Además de los elefantes, entre las especies más beneficiadas por las decisiones tomadas por la COP de CITES se encuentran la tortuga carey y otras tortugas marinas.
Los gobiernos han adoptado fuertes medidas para ayudar a combatir su tráfico ilegal y así frenar su rápido declive.
Grandes felinos como leopardos, jaguares y tigres también han encontrado apoyo en esta reunión para frenar el tráfico de su especie, con medidas como la mejora en la denuncia de granjas de cría en cautividad de tigres, lo que supone una gran preocupación por su potencial contribución al comercio ilegal y a su caza furtiva en libertad.