Zimbabue anunció que renunció a procesar judicialmente al dentista y cazador estadounidense que mató en julio pasado al emblemático león Cecil, puesto que ‘sus papeles estaban en regla’ e ignoraba que cometía una infracción.
‘Está probado que (el dentista Walter) Palmer estuvo en Zimbabue porque todos sus papeles estaban en regla’, afirmó la ministra del Medio Ambiente Oppah Muchinguri ante la prensa en Harare, añadiendo que el dentista siempre será bienvenido a Zimbabue, ‘pero no para cazar’.
En realidad, explicó la ministra, el propietario del terreno en el cual se realizó la cacería no tenía derecho a proponer matar al león en ese lugar, puesto que no le había sido atribuido ninguna cuota de caza.
Palmer, que seguía a su guía, ignoraba en qué lugar se encontraba exactamente cuando disparó con su arco una flecha contra Cecil. Pero el dentista estadounidense había pagado de manera legal 55.000 dólares (unos 50.000 euros) por el permiso de caza y el safari.