Los científicos llevan años indagando qué repercusiones tendrá el cambio climático para los millones de personas que viven en la costa en todo el mundo, una pregunta cuya respuesta puede estar en el pasado: La última vez que la Tierra tuvo la temperatura actual, el mar subió unos ocho metros.
El Servicio Geológico de Estados Unidos está recabando datos sobre fósiles marinos de todo el mundo para conocer qué puede pasar si el calentamiento global derrite las masas de hielo que hoy cubren la Antártida y Groenlandia.
Esos registros fósiles apuntan en la misma línea: existen restos de corales y moluscos en distintos continentes a cotas situadas entre ocho y 24 metros por encima del nivel actual del mar.
En el caso de España, el Servicio Geológico estadounidense se ha fijado en el archipiélago atlántico de Canarias porque en dos islas (Gran Canaria y Fuerteventura) hay capas con fósiles que acreditan los dos últimos momentos de mayor subida de los océanos entre glaciación y glaciación: hace 481 mil y 130 mil años, respectivamente.
Meco explicó que si la historia del planeta se examinara a través de una gráfica de temperaturas, esos dos momentos del Cuaternario serían los únicos que mostrarían picos por encima de los niveles medios que hoy marcan los termómetros en todo el mundo.
Este investigador, que lleva toda su carrera trabajando en el estudio de los paleoclimas marinos, subrayó que para que todos los océanos del mundo se situaran hace 130 mil años unos ocho metros por encima del su nivel actual, tuvieron que fundirse todos los hielos de Groenlandia y una parte de la Antártida.
Esa referencia, añade, puede arrojar luz sobre el desastre que puede provocar el cambio climático si prosigue a su ritmo actual, porque en el pasado geológico de la Tierra no hay ningún otro momento en temperaturas que se parezca más al presente que el periodo interglacial ocurrido entre hace 130 mil y 120 mil años.