Por segundo año consecutivo, la ciudad más austral del mundo será base de la misión IceBridge. Este programa de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de Estados Unidos (NASA) estudiará vía aérea el comportamiento de los glaciares y las capas de hielo de los mares de Bellingshausen y Weddel, ubicados al oriente y occidente de la Península Antártica. Las actividades se realizarán mediante vuelos de relevamiento llevados adelante por la aeronave P-3, destinada a esta misión.
Partiendo desde el aeropuerto Malvinas Argentinas de la capital fueguina, esta importante actividad científica consolida a Ushuaia como base logística para estas importantes misiones al continente blanco y la posiciona como puerta de entrada a la Antártida.
Esto se complementa con la actividad del puerto de Ushuaia, desde donde parte el 90 por ciento de los cruceros turísticos que recorren la Antártida y también sirve de base de apoyo a las campañas antárticas de países como España.
Ushuaia se encuentra en una excelente posición frente a la Antártida. Esto permite maximizar tiempos de relevamientos de nuevos datos mientras se sobrevuela la Antártida y aéreas circundantes, dependiendo de las condiciones climáticas. Las actividades se llevarán adelante por espacio de un mes.
IceBridge es el estudio aerotransportado más grande para relevar el hielo polar que existe en el mundo. Este proyecto inició en 2009 y que se espera que concluya en 2020. Entre marzo y mayo sobrevuela Groenlandia, y entre octubre y noviembre, la Antártida con el objetivo de monitorear cómo cambian los polos.