Investigadores de la Universidad de Berna, en Suiza, descubrieron que las ratas son capaces de memorizar actos de amabilidad de sus congéneres y recompensar sus acciones.
De acuerdo con el estudio, a pesar de que ya se tenía conocimiento de su capacidad de apoyo en grupo, no se sabía que estos animales pudieran tener actos de reciprocidad.
Tras observar un experimento donde las ratas fueron más amables con los miembros de su grupo que las habían ayudado anteriormente, los científicos sugieren que este tipo de comportamiento se puede deber a que los roedores busquen de alguna manera asegurar el apoyo de sus compañeros en futuras ocasiones.
En el experimento se usaron ratas salvajes cautivas por 2 alimentos, zanahorias y su favorito, los plátanos. A estas se les asignaron un par de roedores ayudantes, y cada uno le entregaba un tipo de alimento diferente.
Posteriormente cambiaban a las ratas de rol, para que las cautivas fueran ayudantes de las que les estuvieron llevando los alimentos y entregaran un copo de cereal a la que eligieran.
Tras los ensayos, se pudo observar que aquellas ratas que llevaron plátanosa las que estuvieron cautivas anteriormente, recibieron con mayor frecuencia piezas de cereal en comparación con las que llevaron zanahorias.