Una imagen que a muchos vecinos llena de bronca: ese dueño de un perro que saca a su mascota a pasear y no retira las heces del asfalto. Esa situación está contemplada como un delito ante la ley, pero la realidad es que resulta muy difícil poder detectar a los infractores. Así, un legislador porteño presentó un proyecto para que se pueda denunciar a través de un proceso de fotomultas.
El diputado Sergio Abrevaya, del Partido GEN, presentó la iniciativa ante la Legislatura porteña, donde se contempla la implementación del control ciudadano de esta infracción y en el que se apunta a un incremento de las sanciones para aquellos que las cometan.
“Tenemos que aprender a vivir en comunidad y pensar en el otro. No levantar las heces es una muestra de desprecio por los demás con consecuencias en salubridad e higiene”, afirmó Abrevaya.
El proyecto alienta a que cada ciudadano pueda efectuar una denuncia a cualquier vecino que encuentre sin levantar las heces de su mascota en la vereda. Aquellos que deseen denunciar un caso, deberían hacerlo mediante la aplicación del Gobierno de la Ciudad.
Allí, tendrá que aportar los datos de su nombre y apellido, número de DNI y domicilio. Además, deberá incorporar a la denuncia una foto o video donde se refleje al infractor cometiendo el delito, con la especificación de la fecha, lugar y hora, y también aportar la mayor cantidad de datos que confirmen la identidad del denunciado. Las denuncias sólo podrán ser realizadas por mayores de 18 años.
“Hay gente a la que no le importa dejar las heces en la vereda. Hay muchísimos vecinos que me han pedido hacer algo. Y me parece que hay que hacer algo más de lo que dice la normativa hoy en día”, agregó Abrevaya.
Hasta el momento, la Ley N° 451 en su Capítulo III, Art. 1.3.12. “TRANSITO Y EXCREMENTO DE ANIMALES” dice que “El/la que transite con uno o más animales en su custodia en sectores no permitidos por la legislación vigente o lo haga en lugares públicos o privados de acceso público sin colocarles rienda, o que no proceda a la limpieza de su materia fecal es sancionado/a con una multa de 15 a 100 unidades fijas”. Eso equivale a un pago de 795 a 5.300 pesos.
El nuevo proyecto de ley promulga una modificación de esa misma ley y que la sanción a cumplir por los infractores sea el pago de una multa de 50 a 250 unidades fijas. Es decir, de 2.650 a 13.250 pesos.
La multa también contempla a aquellos que transiten con perros en zonas no permitidas por la legislación vigente o lo haga en lugares públicos o privados sin colocarles rienda a los animales.
Como parte de la sanción, también se estipula la concurrencia a cursos de capacitación en materia ambiental y cuidado responsable de los animales domésticos.
El proyecto de Ley se basó en un informe realizado en 2019 por científicos del Conicet y estudiantes de la Universidad de Buenos Aires después de un exhaustivo estudio a 2.835 caninos en la Ciudad de Buenos Aires. Algunos de ellos fueron paseados por sus dueños y otros por los propios paseadores.
Ese estudio reveló que en la Ciudad de Buenos Aires hubo hasta al menos hace dos años un promedio de 26 restos de materia fecal de animales domésticos por cuadra. Además, se detectó que sólo uno de cada tres paseadores de perros se toma el trabajo de recoger las heces de sus animales en una bolsa.
“Además se evidenciaron 8.155 heces fuera de los espacios verdes: cerca del 63% se observó en los canteros de los árboles, el 28% sobre las baldosas, el 3% en el cordón de las veredas, casi el 7% en sectores rotos y en una acera muy maltrecha se encontraron 239 fragmentos de excrementos”, rezó el proyecto de ley acerca de los resultados de la investigación científica.
Además, se detectó que 9 de cada 10 veredas de la Ciudad de Buenos Aires tiene al menos una disposición de heces de animales por día.
“Esto se debe denunciar como también se denuncia el mal estacionamiento. Es un comportamiento tan malo, tan agresivo hacia el otro y la comunidad, que tenemos que lograr la manera de que eso cambie”, le dijo Abrevaya.
El proyecto de ley indicó que la deposición de heces en la vía pública “es un problema ambiental que repercute tanto en la Salud Animal como en la Salud Pública de nuestra comunidad ya que la materia fecal luego del transcurso de 24 horas, por la acción de los factores ambientales se solidifica y se convierte en polvo que luego por acción del viento se dispersa en el aire. Dependiendo de las condiciones climáticas, existe también la posibilidad de contaminación del agua en caso de que llueva, lo que representa un riesgo sanitario y ambiental aún mayor ya que se disemina al acuífero subterráneo”.
De acuerdo a una Encuesta Anual de Hogares 2018, se definió que en ese momento había unos 475.000 perros y unos 295.000 gatos domésticos. Las asociaciones protectoras de animales, por su lado, estimaron que la población total de estos animales es de 1.200.000.
En ciudades como Osaka, en Japón, se desarrolló en 2015 una aplicación móvil para denunciar la presencia de heces de perros en las veredas y otros espacios públicos.