Lo peor que le ha pasado a la Tierra desde el meteorito que extinguió a los dinosaurios fue el el surgimiento de los seres humanos.
En pocos miles de años, nuestra especie transformó el planeta en un lugar lleno de contaminación, muerte e inhóspitos paisajes que hacen que todas las criaturas vivientes, incluyéndonos, sufran y luchen por sobrevivir.
Afortunadamente y no, las cuarentenas provocadas por el Covid-19 le han dado un respiro al planeta y la naturaleza se ha recuperado poco a poco de nuestra mala influencia y aunque aún queda mucho por hacer para asegurar nuestra estadía aquí, la vida no se rinde y sigue floreciendo en el planeta.
Actualmente uno de los proyectos que nos ha traído esperanza es un realizado por Malik Amin Aslam, Asesor del Primer Ministro y Ministro Federal de Cambio Climático de Pakistán, quien compartió un video en su Twitter de cómo era la Reserva Natrual de Balloki hace un año y cómo se ve ahora, luego de que la iniciativa gubernamental Billion Trees Tsunami comenzara en 2019.
El vídeo muestra una tierra estéril prácticamente sin vegetación en millas y ahora se ve como una zona rica y próspera pavimentada en césped y árboles.
El proyecto 10 Billion Tree Tsunami fue lanzado y financiado por el gobierno para promover la reforestación en Pakistán. El proyecto espera plantar 10 mil millones de árboles en un lapso de cinco años y así lograr una serie de objetivos como aumentar el área forestal, rehabilitar bosques degradados, proteger las áreas verdes y su vida silvestre, así como generar empleos y muchas otras cosas.
Los árboles ayudan a proteger el suelo y regulan el agua en las granjas, además de mitigar las inundaciones y enriquecer el suelo y las áreas circundantes con biodiversidad.
https://www.youtube.com/watch?v=dd34uCCu-6Q&feature=emb_title
En lo que va de 2020, se plantaron 20,798 hectáreas para lograr los objetivos. El Redd Monitor informa que actualmente se plantaron un total de 350,000 hectáreas de árboles y que el proyecto también ha creado alrededor de 3.500 recintos verdes en bosques de propiedad estatal.
Sin embargo, no todo son buenas noticias, pues se han reportado facturaciones falsas, plantaciones falsas y movimiento de tierra de mala calidad, pagos no autorizados y otras actividades ilícitas.
El bloqueo de Covid-19 también ha llevado a los plantadores a ganar alrededor de 500 rupias al día, la mitad de lo que podían en un buen día antes de la pandemia.
Esperamos que los conflictos se resuelvan pronto y poder continuar con tan buena acción para el planeta.