En la II Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Defensa de la Vida, que se realizará en la localidad cochabambina de Tiquipaya, en Bolivia, se marcan las bases para la creación de un tribunal internacional de justicia climática, a pesar de las objeciones de algunos países.
También se define la agenda contra los intereses capitalistas que ponen en peligro la salud humana y el medioambiente con su forma de producción alimentaria.
En la mesa 8 se debate el proyecto para conformar un tribunal con la visión de los pueblos, vinculado al cumplimiento de obligaciones con la Convención Marco de Naciones Unidas sobre cambio climático. No obstante, la propuesta tiene oposición de la mayoría de los países desarrollados.