Una de las grandes desventajas de la energía solar es qué tan dependiente es ésta de las condiciones climáticas locales. Si está lluvioso o nublado, no se puede capturar más energía durante el día. Durante el invierno, las horas de luz del día son más cortas, lo que significa que los paneles solares no absorberán mucha luz solar.
En un esfuerzo para hacer frente a este tipo de variaciones estacionales y de tiempo, Japón está desarrollando un sistema innovador para recoger la energía solar desde el espacio.
Las estaciones solares consistirían en satélites geoestacionarios asentados 36 mil kilómetros por encima de la Tierra, los cuales transmitirían la energía recogida de vuelta al planeta en forma de rayos láser o microondas.
En este momento, el gobierno japonés y su agencia espacial JAXA no están completamente seguros de la mejor manera de transmitir esta energía a través de largas distancias, por lo que están llevando a cabo experimentos en tierra para aprender más.
Dado el reciente auge de la energía solar en Japón, este parece ser el siguiente paso en las investigaciones solares del país.