Al menos nueve muertos y 300 desaparecidos dejó la rotura este viernes de una presa en el municipio de Brumadinho, en el estado de Minas Gerais (sureste de Brasil).
El gobernador del estado, Romeu Zema, dijo que había pocas posibilidades de encontrar más sobrevivientes.
El alcalde de Brumadinho, Avimar de Melo Barcelos, indicó que 100 personas que inicialmente fueron reportadas como desaparecidas ya fueron localizadas con vida.
La minera Vale, dueña de la represa Córrego do Feijão en la que se almacenaban aguas residuales, confirmó que había trabajadores en el área que resultó afectada por una gran corriente de lodo.
‘El rescate y la atención a los heridos se están realizando en el lugar por el Cuerpo de Bomberos y Defensa Civil, aunque no hay confirmación sobre la causa del accidente’, dijo Vale en un comunicado.