Azotada por las llamas, la región chilena de O’Higgins despertó ayer con más de 45 mil hectáreas devastadas y dos de sus provincias bajo ‘estado de catástrofe’, en medio del combate nacional a unos incendios forestales considerados los más destructivos en décadas.
Mientras comienzan a llegar recursos adicionales a las brigadas de emergencias en la zona, unas 200 personas fueron evacuadas y una treintena de casas están afectadas en las provincias de Cardenal Caro y Colchagua (O’Higgins), según informó la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi).
En tanto, un grupo de bomberos brigadistas uruguayos se preparan en la noche de ayer para viajar a Chile para brindar auxilio ante la catástrofe, según supo El Observador.
Los socorristas uruguayos viajarán en el avión Hércules de la Fuerza Área Uruguay, que aterrizó el sábado en el Aeropuerto Internacional de Carrasco tras regresar de la Antártida
La Oficina Nacional de Emergencias (Onemi) de Chile solicitó ayuda internacional para combatir los ‘peores incendios forestales que no conocía en su historia’.
El director nacional del organismo, Ricardo Toro, sostuvo que desde el martes pasado se están realizando las coordinaciones junto a la Cancillería para pedir apoyo a los gobiernos de México, EEUU, Argentina, Canadá, Brasil, Uruguay y Perú.