Tanto el Servicio Geológico Argentino como El Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile decretaron el alerta amarillo en el volcán Copahue, luego de que se registrara actividad en el mismo desde el domingo a primera hora.
Los análisis detectaron un aumento de la energía y la magnitud de las cenizas emanadas desde el cráter principal y dispararon el estado de precaución.
De esta manera, se restringió el acceso a un radio de 1.000 km al mismo, pese a que, por el momento, no generó mayor preocupación entre los especialistas.
‘La señal sísmica registrada en la red de monitoreo del volcán no presenta cambios significativos en energía ni en la cantidad de sismos asociados a la dinámica del sistema, lo que deja de manifiesto la particularidad del proceso, que sin ser eficiente sísmicamente, logra manifestarse en una emisión de cenizas de moderada energía pero constante’, informó el servicio trasandino.
‘Con la declaración de la Alerta Amarilla, se alistarán escalonadamente los recursos necesarios para intervenir de acuerdo a la evolución del evento, con el objeto de evitar que éste crezca en extensión y severidad, minimizando los efectos negativos en las personas, sus bienes y el medio ambiente’, se agregó.
En tanto, se advirtió que el cambio en la actividad superficial del volcán podrá mantenerse durante días ‘sin manifestar cambios en la señal sísmica’, pero aún así manteniendo la columna de cenizas.