Dengue hemorrágico: qué es y cuáles son los síntomas

Más leídas

El dengue hemorrágico, conforme a la propagación de la enfermedad en la Argentina, se convirtió en una preocupación creciente en varios países de región.

Se trata de una forma grave de dengue es causada por el mismo virus, transmitido por el mosquito Aedes aegypti. En ese sentido, es importante contar con la información adecuada para prevenir los contagios.

Además, es fundamental entender por qué las condiciones ambientales actuales influyen en su propagación.

Dengue hemorrágico: qué es

El dengue hemorrágico es una complicación del dengue clásico, que se caracteriza por una mayor severidad en los síntomas y puede llevar a complicaciones potencialmente mortales.

repelente
Repelente para prevenir el dengue hemorrágico.

Esta enfermedad se presenta comúnmente en áreas donde los mosquitos son endémicos, especialmente en climas cálidos y húmedos.

La fiebre hemorrágica del dengue, de acuerdo a información de Manual MSD, puede ser (aunque no siempre) consecuencia de una segunda infección por el virus, lo que aumenta el riesgo de desarrollarla.

Lo que sucede es que el sistema inmunitario de la persona afectada “reacciona agresivamente” contra esta segunda infección. Lo que daña los vasos sanguíneos, que filtran líquido y/o sangre.

A veces los vasos sanguíneos vierten líquido en los pulmones, lo que genera dificultad para respirar.

Los síntomas del dengue hemorrágico

Los síntomas del dengue grave, detalla la Organización Mundial de la Salud (OMS), suelen presentarse cuando desaparece la fiebre y pueden ser los siguientes:

  • Dolor abdominal intenso
  • Vómitos persistentes
  • Respiración acelerada
  • Hemorragias en las encías o la nariz
  • Cansancio
  • agitación
  • Vómitos o heces con sangre
  • Sed intensa
  • Piel pálida y fría
  • Fiebre alta, cercana a los 40°

Cómo prevenir el dengue hemorrágico

La prevención es clave para controlar la propagación del dengue y, por lo tanto, del hemorrágico también. Las medidas esenciales incluyen:

  • Eliminar criaderos de mosquitos: vaciar, limpiar o cubrir recipientes que puedan acumular agua.
  • Uso de repelentes: aplicar repelentes de insectos en la piel y la ropa.
  • Instalación de mosquiteros: utilizar mosquiteros en ventanas y puertas para evitar la entrada de mosquitos.
  • Campañas de concientización: promover el conocimiento sobre el dengue y sus síntomas en la comunidad.
  • Desmalezar patios y jardines
  • Descacharrar: eliminar envases vacíos, juguetes viejos, latas, neumáticos y todo tipo de objetos en desuso
  • Tapar tanques y depósitos de agua

El papel del cambio climático en la propagación del dengue

Las condiciones ambientales juegan un papel crucial en la proliferación del mosquito y, por ende, en la transmisión del dengue. Factores como el clima más cálido y húmedo en algunas regiones, por ejemplo, favorecen la propagación.

La acumulación de agua producto de inundaciones o lluvias excesivas también juega un rol clave. Ya que los criaderos de mosquitos se encuentran en recipientes con agua estancada, por lo que la eliminación de estos focos es vital.

Por otra parte, influye la urbanización descontrolada, ya que el crecimiento urbano sin planificación contribuye a la creación de hábitats propicios para los mosquitos.

¿Ya conoces nuestro canal de YouTube? ¡Suscríbete!

Últimas noticias

Dos de cada tres personas piden políticas ambientales más estrictas

Una encuesta del Observatorio Humanitario de Cruz Roja Argentina, reveló que las políticas ambientales son parte de los reclamos ciudadanos

Noticias relacionadas