La meteorología mantiene en vilo a millones de habitantes del centro de Estados Unidos. Un gran sistema tormentoso atraviesa el país y en lo que va de semana se han registrado más de 60 informes de tornados, el más violento el que ha sacudido la capital de Missouri, Jefferson City, esta madrugada.
El tornado se ha cobrado la vida de tres personas y hay hasta una veintena de heridos, según medios locales. Además, la zona afectada ha resultado gravemente afectada, causando grandes daños materiales. Justo antes de que se produjera el tornado, el Servicio Meteorológico Nacional emitió en Twitter una advertencia de “tornado violento confirmado: ¡refugio ahora!” A las 11:47 p.m. (hora local).
A esta oleada de tornados le han acompañado intensas lluvias y tormentas eléctricas que han dejado sin luz a buena parte de la región. “Tenemos daños a los edificios estatales y el suministro eléctrico ha disminuido en algunas áreas”, dijo el gobernador Mike Parson en un tweet el jueves. “Lo estamos haciendo bien, pero rezamos por los que sufrieron daños”.
Las tormentas y las lluvias torrenciales han devastado el Medio Oeste, desde Texas hasta Oklahoma, Kansas, Nebraska, Iowa, Missouri e Illinois.
Dos barcazas se soltaron y flotaron velozmente por el río Arkansas, en el este de Oklahoma, el miércoles, extendiendo la alarma río abajo cuando amenazaron con golpear una represa.
Las autoridades instaron a los residentes de varias ciudades pequeñas en Oklahoma y Kansas a abandonar sus hogares a medida que crecían los ríos y arroyos.
La ciudad del río Arkansas de Webbers Falls, Oklahoma, fue una de esas ciudades. Los funcionarios de la ciudad ordenaron una evacuación obligatoria el miércoles por la tarde debido al aumento del nivel del río.