Una tormenta invernal que el domingo generó caos para los que viajaban tras el Día de Acción de Gracias provocará más vientos fuertes y nevadas a medida que avanza hacia el noreste, desde el medio oeste hasta la parte baja de la región de los Grandes Lagos.
Miles de vuelos fueron cancelados o retrasados el domingo y más de 10 millones de personas se encuentran bajo advertencia de tormenta de nieve debido a las condiciones invernales.
El gobernador de Kansas, Jeff Colyer, declaró el estado de emergencia en el estado y funcionarios dijeron que las condiciones en las carreteras eran ‘traicioneras’ en algunas zonas.
‘Recomendamos ampliamente que pospongan sus planes de viaje, de ser posible; sin embargo, si tiene que tomar la carretera, asegúrese de que el equipo de emergencia del vehículo se encuentre abastecido, que su tanque de combustible esté lleno y su teléfono y cargador vayan con usted y que alguien sepa su programa de viaje’, declaró.
El aeropuerto internacional de Kansas City se cerró a los vuelos que llegan al aeródromo debido a la baja visibilidad provocada por condiciones climáticas, pero reabrió el domingo por la noche, de acuerdo con la cuenta de Twitter del aeropuerto.