Los automóviles diésel podrán producir más del doble de las emisiones contaminantes permitidas hasta el momento, gracias a un acuerdo alcanzado en Bruselas por los representantes de los Gobiernos europeos.
El acuerdo llega en el medio del escándalo de Volkswagen por trucar con un software las emisiones reales de óxidos de nitrógeno (NOx) de sus coches.
Los límites existentes de la UE estipulan que los coches no deberían emitir más de 80 miligramos de NOx por kilómetro recorrido.
El acuerdo alcanzado significa que, bajo la nuevas reglas que entrarán en vigor a partir de 2017, los coches podrán emitir hasta 168 mg/km hasta 2019.