Los Ángeles, conocida como la capital del espectáculo, continúa asediada por cuatro grandes incendios.
Algunos están más cerca de su corazón como el que lleva un día amenazando el museo Getty y las casas de los ricos y famosos en las proximidades de Bel Air.
Otros afectan a áreas muy poblados al norte de la ciudad y en localidades colindantes, como Ojai y Ventura. Y todos ellos están siendo avivados por la sequía pertinaz que vive la zona, así como los vientos de Santa Ana, que, con una fuerza parecida a la de un huracán y muy secos, son la mejor forma de propagación de las llamas.
Los cuatro incendios continuaron avanzando la noche del miércoles, lo que hizo aumentar en 30 mil personas el número de evacuados, hasta los 230 mil, y obligó a cortar más carreteras.
Las autoridades emitieron una alerta de emergencia por ‘peligro extremo de fuego’ en el condado de Los Ángeles.