La ONU pidió a México intensificar su compromiso ambiental y presentar un plan climático ambicioso antes de la COP30. El país tiene una oportunidad única para posicionarse como referente en energías limpias, especialmente gracias a su potencial en energía solar y eólica.
En un contexto global que exige acción urgente, México se encuentra en una etapa clave para alinear su desarrollo económico con la sostenibilidad. Apostar por una transición energética no solo es viable, sino necesaria para enfrentar los desafíos del cambio climático.
La ONU considera que este esfuerzo no debe recaer únicamente en el gobierno, sino también en el sector privado, que puede impulsar la transformación mediante inversiones responsables y sostenibles. La cooperación entre actores públicos y privados es esencial para lograr una estrategia climática efectiva.
Además, el nuevo plan climático —conocido como NDC 3.0— debe enfocarse en generar bienestar para la población mexicana, integrando metas ambientales con beneficios sociales como empleo, salud y seguridad energética.

Liderar la acción climática: un desafío económico y ambiental
La transición energética global ya moviliza más de 2 billones de dólares y México tiene el potencial de atraer parte de esa inversión si actúa con rapidez y visión. La oportunidad de liderar en América Latina está al alcance, siempre que el país priorice políticas verdes y una economía baja en carbono.
Sectores clave como la agricultura y la energía deberán alinearse con este nuevo rumbo. Las decisiones que se tomen en 2024 serán determinantes para definir si México logra capitalizar los beneficios de un futuro sustentable.
En los próximos días, autoridades nacionales, legisladores y representantes sociales discutirán el rumbo de la estrategia climática. El enfoque está puesto en construir una hoja de ruta que permita combinar desarrollo económico con protección ambiental.
Con la mirada internacional puesta en Belém, Brasil, sede de la COP30, México deberá demostrar que está preparado para ser parte de la solución global al cambio climático.

Avances de México rumbo a la COP30
En el marco de su compromiso con el Acuerdo de París y de cara a la COP30, México comenzó a implementar una serie de medidas orientadas a fortalecer su acción climática. Entre ellas se destaca la actualización de su Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC 3.0), que busca establecer metas más ambiciosas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
A nivel energético, el país impulsó proyectos de energías renovables, principalmente solares y eólicos, en regiones estratégicas como el norte y sureste del territorio. Estas iniciativas se complementan con inversiones públicas y privadas en infraestructura limpia, eficiencia energética y movilidad sustentable.
En el sector agroalimentario, México puso en marcha programas para fomentar prácticas agrícolas sostenibles, la conservación de suelos y la protección de recursos hídricos, con el objetivo de reducir el impacto ambiental del campo y aumentar la resiliencia frente al cambio climático.
Además, se están elaborando estrategias para fortalecer la adaptación en comunidades vulnerables, mejorar la gestión forestal y avanzar en una economía circular. Estas acciones forman parte del compromiso del país para llegar a la COP30 con una política climática coherente, sólida y orientada al bienestar de su población.