Desde hace tres años organizaciones ambientales y pescadores le reclaman al gobierno de la provincia de Santa Fe la entrega de información respecto a la depredación de peces en el río Paraná. Ahora, la Justicia estableció un plazo de 150 días hábiles para que el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático elabore un plan en torno al recurso íctico. La falta de control, la depredación de la fauna y el papel que juegan los frigoríficos se ponen en tela de juicio.
Fito Adolfo Espíndola, socio de la Asociación De Pescadores Deportivos del Litoral (APDL), contó cómo inició el reclamo de su sector junto a organizaciones ambientales: “Solicitábamos al gobierno provincial que convoque a las reuniones del Consejo Provincial Pesquero (CPP) establecidas por ley y que no se realizaban. Su argumento era que la pandemia imposibilitaba eso. Después de 18 meses de esta gestión, el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático realizó la primera reunión de CPP. A esa situación, se le sumaba la bajante extraordinaria del río Paraná, por lo cual se le presentó un recurso de amparo donde se le pidió a la provincia la elaboración de un plan de manejo, además que realice los encuentros”.
“Transcurridos tres años, la Justicia de Rosario le ordena al gobierno de la provincia de Santa Fe que dentro de 150 días hábiles elabore y presente un plan estratégico para la utilización sustentable del recurso íctico. Porque este no tiene un buen estado, no goza de buena salud, por lo que la información o plan que haga debe ser integral, salir de un análisis de su estado actual, con información científica, ambiental, local y actualizada”, expuso.
Y agregó, en torno a lo resuelto por la Justica: “Santa Fe carece de información local, de cómo está el recurso en cada una de las jurisdicciones de la provincia. La Justicia dice que esta debe ser suficiente, precisa, pública y de libre acceso. Además, ordenó que se haga la audiencia pública de pesca anual que se debe realizar todos los diciembres, van prácticamente cuatro años de gestión y nunca se hizo. En esta, el gobierno tiene que informar qué hizo con la protección del recurso íctico, sus resultados y qué piensa hacer al próximo año. No tuvimos la posibilidad, como actores involucrados y en mi caso como integrante del Consejo Provincial Pesquero, de exponer nuestra mirada de lo que pasa con el recurso. Y que haya controles de su cumplimiento, que es otra de las carencias de este gobierno”, expuso el referente del sector.
Explicó que desde el momento en el que el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático le solicitó al Poder Ejecutivo tener la administración de explotación y control del recurso íctico, por medio de un decreto se transfirieron todas las actividades de fiscalización y control del Ministerio de Producción a la cartera ambiental. Ante este traspaso de facultades, los inspectores que tenía la provincia y que “no eran muchos”, dejaron de estar habilitados para controlar. “Al día de hoy el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático aún no sacó una resolución para nombrar nuevamente a esos guardafaunas honorarios y así al menos contar con seis o siete a nivel provincial”, reveló.
Pese a que hay 150 días hábiles para la elaboración de este plan, el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático de la provincia de Santa Fe tiene la potestad de apelar esta decisión judicial. En caso de no ser así, por el plazo fijado, el próximo gobierno en asumir tendrá esta responsabilidad.
Los frigorificos y la depredación en el río Paraná
Además de esta falta de datos respecto al recurso, se vive de una depredación en el río Paraná por parte de los frigoríficos: “Si bien sabemos lo que se exporta, que eran 15.000 toneladas en promedio y que luego bajaron a 6.000 con la bajante extraordinaria, también es cierto que, al bajar proporcionalmente la exportación de sábalos, se incrementó la exportación de carpa. Cuando uno habla con los pescadores comerciales dicen que esta especie no la sacan porque los frigoríficos no las compran y esa es otra de las dudas que nos deja la carencia de control, si es carpa o sábalo lo que se exporta”.
“El comercio interno de los frigoríficos lo desconocemos. En la provincia de Santa Fe nunca se pudo conocer cuál es el consumo interno del pescado que realizan los acopiadores. Entre los 15 o 16 que hay distribuidos en Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires, es indudable que uno desconfíe. ¿Se exporta más allá de lo que realmente soporta el río? La Justicia pide información sobre cuál el volumen de extracción que realiza la provincia de Santa Fe y cuál es la capacidad de reposición que tiene el río del recurso íctico. Entonces, seguir sacando y sacando sin tener datos científicos específicos que nos permitan saber dónde estamos parados, me parece que contribuye a que se siga depredando el recurso“, señaló Fito Adolfo Espíndola.
