Un recorte de emisiones de “al menos 55%” en diez años respecto de los niveles de 1990 es “realizable” en el plano económico y “ventajoso para Europa”, según el plan para el clima 2030 que será presentado a la presidenta de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, en un borrador al que pudo acceder la agencia de noticias ANSA.
El documento sugiere intervenciones en todos los sectores, en particular los transportes y la energía, pero también la agricultura y la construcción.
El objetivo actual de reducción de emisiones para 2030 es del 40% respecto de 1990. Según el borrador, que aún puede sufrir modificaciones, la Comisión Europea podrá incluir el objetivo de reducción de las emisiones al menos el 55% para 2030 en la ley de clima y hacerlo vinculante a nivel europeo.
Uno de los instrumentos principales con los que la Comisión quiere alcanzar su objetivo es el mercado de las emisiones (ETS), que quiere extender al sector marítimo, reducir los cupos gratuitos que tiene ahora la aviación hasta “incluir el transporte sobre goma y los edificios”, con la hipótesis de aplicar el concepto también a los distribuidores de carburante.
Tendrán un papel importante para la movilidad con emisiones cero los nuevos límites al CO2 impuestos a los productores, y se pedirán también mayores esfuerzos a la agricultura, aunque teniendo en cuenta los límites del sector.
El documento quiere abrir un debate que durará todo el otoño boreal, y luego “en los próximos nueve meses la Comisión propondrá una revisión de la legislación sobre el clima y energía”, con gran atención a la potencialidad de las energías renovables y la eficiencia energética.