Bridenstine, de 42 años, es representante en la Cámara baja por el Primer Distrito del estado de Oklahoma y su designación, que la Casa Blanca formalizó este fin de semana, depende aún de la aprobación del Senado.
De ser confirmado por la Cámara alta para ser el décimo tercer administrador de la NASA, el congresista se convertiría en el primer político elegido para un cargo público que accede a ese puesto.
Expiloto de combate de la Armada de Estados Unidos que participó en las guerras de Irak y Afganistán, Bridenstine logró su escaño en la Cámara de Representantes en 2012, después de trabajar como director ejecutivo del Museo del Espacio y el Aire de Tulsa, Oklahoma.
Como miembro del Comité de Ciencia, Espacio y Tecnología de la Cámara baja, el congresista se ha centrado en revitalizar la NASA, con la presentación de un proyecto legislativo dirigido a ese fin que lleva por nombre ‘Ley del Renacimiento Espacial Estadounidense’.
Respecto al cambio climático, a cuya investigación la NASA dedica notables recursos a nivel mundial, Bridenstine ha llegado a negar que la actividad humana sea responsable del incremento de la temperatura de la Tierra.
‘Yo diría que el clima está cambiando. Siempre ha cambiado. Hubo periodos de tiempo, mucho antes del motor de combustión interna, en los que la Tierra era mucho más cálida que hoy’, afirmó en una entrevista de 2016.