La contaminaciĂłn por microfibras es un grave problema que cada dĂa afecta más a los ocĂ©anos. Cada vez que lavas tu abrigo o tu ropa favorita, pequeños filamentos se desprenden de la textura y bajan por el desagĂĽe, acabando en corrientes abiertas y perjudicando la vida marina. Al ver este problema, Rachel Miller decidiĂł poner todo su ingenio a funcionar para resolverlo, por lo que creĂł la llamada Cora Ball.
Esta bola del tamaño de una naranja, fabricada con plástico reciclado, está pensada para meterla en el lavarropas con tus prendas. Unos pequeños brazos con pomos redondos en los cierres atrapan los pequeños hilos que se desprenden de la ropa, cogiéndolos antes de que se canalicen con el agua del lavado.
DespuĂ©s de la fabricaciĂłn de varios prototipos, la motivaciĂłn para la configuraciĂłn completa de Cora Ball vino del mar real, explĂcitamente del coral, como indicĂł Rachel Miller, autora del Proyecto. “El coral hace precisamente lo que necesitábamos que hiciera nuestra cora ball“, señalĂł Miller. “Obtiene cosas diminutas del agua que fluye”.
Los bordes de los brazos de Cora Ball están diseñados para atrapar las hebras, mientras que los pomos redondos protegen la ropa de los enredos.
Los materiales textiles, como el vellĂłn, son enormes dispersadores de las microfibras, como indica un estudio de la Universidad de California. En dicha investigaciĂłn del Marine Pollution Bulletin descubriĂł que cada dĂa se descargan 300 millones de microfibras en el ocĂ©ano Atlántico desde el rĂo Hudson de Nueva York.
Cada Bola Cora, de 4 pulgadas, se fabrica en Vermont, Estados Unidos, utilizando plástico elástico reutilizado y reciclable, y está pensada para durar largos periodos de lavado y conseguir grandes cantidades de microfibras, según la organización. Cuestan 30 dólares la unidad.
La Cora Ball está hecha para la lavadora de ropa, pero soportará un viaje mixto a través de la secadora, dice la autora.
Cuando el Cora Ball parece que necesita limpieza, se saca el nudo de pelo y fibra, y se pone el material en la basura junto a la acumulaciĂłn de la secadora.
La organización dice que diferentes organizaciones venden canales de purificación para lavadoras de ropa que eliminan las microfibras, y que requieren una limpieza después de cada cuatro o más pilas. Una Cora Ball es más sencilla de limpiar, y sólo requiere una limpieza después de cada 10-20 cargas.
A medida que los pelos y las microfibras se acumulan en mayores medidas de pelusa, la bola realmente hace una demostraciĂłn superior de conseguir más restos y desechos, algo asĂ como una bola de nieve que se mueve por una pendiente, dijo Rachel: “Simplemente hay que dejarla, y cuando estĂ© llena limpiarla”.