La Municipalidad de Trelew continúa con el plan de recuperación de aceites vegetales usados (AVUS), en comercios y domicilios particulares, tarea que forma parte del programa ambiental “Trelew Conciencia Activa”, implementado desde el año 2018. Este semana fueron retirados por la empresa RBA Ambiental 25 mil litros desde el centro de acopio ubicado en el basural municipal.
En lo que va del 2021 se recuperaron un total de 55 mil litros de AVUS y se espera llegar este año a un total de 100 mil litros, duplicando la cantidad alcanzada durante el año 2020.
El programa de recuperación de aceites vegetales usado fue puesto en marcha por el área ambiental de la municipalidad de Trelew, a través de la Coordinación de Gestión Urbana, dependiente de la Secretaría de Planificación, Obras y Servicios Públicos.
El secretario de Planificación Obras y Servicios Públicos, Sebastián de la Vallina, indicó que “se trabaja en el reacondicionamiento del centro de acopio de AVUS, para contar con mayor infraestructura a la hora de gestionar dicho residuo, ampliando la capacidad de recepción”.
También adelantó que “para continuar fortaleciendo la concientización sobre este tema la Dirección de Gestión Ambiental comenzara una campaña barrio por barrio para informar a los vecinos sobre los beneficios que genera en el ambiente la correcta gestión y disposición de este residuos”.
Actualmente los vecinos pueden llevar su aceite de cocina usado a la Coordinación de Gestión Urbana, ubicada en Mitre 73, o acopiar 5 litros y comunicarse para su retiro en el domicilio.
“El aceite de cocina, como todo residuo que no es tratado correctamente, genera impactos negativos sobre la biodiversidad y los ecosistemas, con este programa logramos comenzar a revertir la problemática. Es una política pública participativa donde se destaca la conciencia de sector comercial gastronómico que en un corto plazo fue capaz de adoptar una conducta sustentable que permite hacer de un residuo, un recurso sostenible”, indicó el funcionario municipal.
De la Vallina aseguró que este programa permite, entre otros beneficios ambientales, “proteger la infraestructura sanitaria básica de nuestra ciudad, ya que la mala disposición de aceites genera daños y taponamientos en sistema cloacal”.
Seguridad Medioambiental
La correcta disposición del Aceite de Cocina Usado (ACU) evita la contaminación de aguas urbanas, consecuencia de su vertido irresponsable e incontrolado en desagües y alcantarillas. Los efectos nocivos afectan a toda la comunidad, ya que uno solo litro de ACU puede contaminar más de 1.000 litros de agua y su acumulación en desagües cloacales y pluviales facilita la obstrucción de conductos y la proliferación de colonias de roedores e insectos.
Además su disposición en pozos ciegos produce la impermeabilización de los mismos, obstruyendo la correcta absorción de líquidos.
Los aceites vegetales usados que llegan a los ríos, se acumulan en la superficie e impiden el paso de la luz solar y del oxígeno, aumentando la mortandad de la flora y la fauna acuática.