Buenos Aires no solo se caracteriza por tener una de las ciudades más conocidas y transitadas del país, sino que también cuenta con una gran cantidad de rincones alejados de las grandes urbes que ofrecen tranquilidad y entornos naturales únicos. Un ejemplo de esto es la localidad de Manzanares, un sitio que parece haberse detenido en el tiempo.
Este lugar conserva su ritmo tranquilo, espíritu acogedor e identidad de pueblo lo vuelve una opción ideal para una escapada corta, sumergida en medio de la naturaleza, disfrutando del aire libre y la gastronomía local.
Manzanares se encuentra ubicada enfrente al Parque Industrial de Pilar, lo que puede parecer una especie de paradoja, ya que el pueblo conserva su identidad rural con sus paisajes naturales que invitan a desconectarse de la rutina, a pesar del avance urbano de sus alrededores.
Uno de los atractivos principales de la localidad es la pequeña laguna que se encuentra situada a las orillas del río Luján, que brinda la posibilidad de recrearse al aire libre, con picnics, paseos en kayak y pesca recreativa que permite disfrutar de la vegetación y fauna autóctona. Una opción perfecta para aquellos que busquen dejar atrás la rutina, aunque sea por pocos días.

La Reserva Natural de Pilar, una parada obligatoria
La tranquilidad del río Luján no es el único atractivo de la localidad de Manzanares, ya que la Reserva Natural de Pilar se presenta como una opción que los amantes de la naturaleza no pueden dejar pasar. Con sus casi 300 hectáreas protegidas del ecosistema pampeano, este lugar se vuelve el punto ideal para el avisaje de aves y la observación de fauna silvestre, ofreciendo así.
Pero también se puede aprovechar el Parque Pilar, ubicado dentro del instituto Carlos Pellegrini, que contiene un bosque con arboleda centenaria, la cual es ideal para realizar caminatas y actividades al aire libre.

¿Cómo llegar a Manzanares?
Manzanares es uno de esos pueblos bonaerenses que combinan tranquilidad rural con excelente conectividad, lo que lo convierte en un destino cada vez más elegido para escapadas de fin de semana o incluso para vivir.
Ubicado a solo 70 kilómetros de la capital, el viaje en auto puede hacerse en menos de una hora, tomando la Autopista Panamericana y su conexión con la Ruta Nacional 8. Incluso, se puede llegar en colectivo, con un tiempo de viaje similar, lo que es ideal para quienes prefieren no conducir.
Otra alternativa es el tren: la línea San Martín conecta la ciudad con Manzanares en aproximadamente una hora y media, ofreciendo una opción cómoda para disfrutar del paisaje durante el trayecto.
Rodeado de barrios cerrados, campos productivos y una comunidad activa, Manzanares mantiene su espíritu de pueblo tranquilo, con calles amigables para recorrer a pie y espacios verdes que invitan al descanso. Es el lugar perfecto para quienes buscan un respiro en la naturaleza sin alejarse demasiado del ritmo porteño.
Fuente: minuto1.
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