Estados Unidos y Brasil acordaron que al menos un 20% de la generación de electricidad en cada uno de sus territorios en 2030 provendrá de fuentes renovables que no sean energía hidráulica, en un compromiso conjunto con el que pretenden impulsar las negociaciones globales sobre el cambio climático.
El acuerdo lo alcanzaron los presidentes de EE.UU., Barack Obama, y de Brasil, Dilma Rousseff, durante su reunión de hoy en Washington, según informó la Casa Blanca.
“Tanto Estados Unidos como Brasil pretenden aumentar su proporción de renovables -más allá de la energía hidráulica- en sus mezclas respectivas de generación de electricidad al nivel del 20 % para 2030″, según un comunicado conjunto de los dos Gobiernos.
Además, Brasil se comprometió a que, para 2030, entre el 28 % y el 33 % de su matriz energética total estará compuesta por fuentes renovables que no sean energía hidráulica.