La ciudad de Lisboa recordó el devastador terremoto que el 1 de noviembre de 1755 mató a decenas de miles de habitantes y destruyó gran parte de la capital portuguesa.
Dentro de los actos conmemorativos, en esta jornada tuvo lugar una conferencia internacional en la que participaron especialistas en sismología y catástrofes naturales.
Fruto de ese foro, el Ayuntamiento de Lisboa y el centro japonés Hyogo Research Institute, especializado en terremotos, firmaron un acuerdo de colaboración centrado en la cualificación de los cuadros técnicos de la capital portuguesa y en tener un mayor y mejor conocimiento de los desastres naturales.