La misión para descubrir si un planeta que orbita a nuestra estrella vecina más cercana, Próxima Centauri (a entre 4,2 años luz o 25 trillones de millas de la tierra), tiene el potencial para sustentar la vida ha dado un nuevo giro emocionante. El planeta fue descubierto en agosto de 2016 y se piensa que es de tamaño similar a la Tierra, creando la posibilidad de que podría tener una atmósfera similar a la de la Tierra.
Científicos de la Universidad de Exeter se han embarcado en sus primeros pasos para intentar explorar el potencial clima del exoplaneta, conocido como Próxima B. Los primeros estudios han sugerido que el planeta está en la zona habitable de su estrella Róxima Centauri, la región donde, dada una atmósfera similar a la Tierra y una estructura adecuada, recibiría la cantidad correcta de luz para albergar agua líquida en su superficie.
Ahora, el equipo de expertos en astrofísica y meteorología ha emprendido nuevas investigaciones para explorar el potencial clima del planeta, hacia el objetivo a más largo plazo de revelar si tiene potencial para sustentar vida.
Utilizando el modelo unificado ‘Met Office Unified Model’, que se ha empleado con éxito para estudiar el clima de la Tierra durante varias décadas, el equipo simuló el clima de Próxima B si tuviera una composición atmosférica similar a La Tierra.