El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, convocó la próxima Cumbre del Clima, que se celebrará en septiembre de 2019 en Nueva York, ciudad sede de la ONU, donde se revisarán los compromisos contraídos en París y se diseñarán planes de desarrollo sostenibles ‘más ambiciosos’.
“Los efectos del cambio climático siguen extendiéndose por todo el mundo. En 2017 el costo económico total de los desastres relacionados con el clima alcanzó la cifra récord de 320.000 millones de dólares”, afirmó Guterres en la apertura del 37º periodo de sesiones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe en la capital de Cuba.
El dirigente de la ONU insistió en la “necesidad de adoptar medidas colectivas para apartar al mundo de ese camino que lleva al suicidio” y afirmó que los nuevos planes deberán basarse en la “inversión en un desarrollo resiliente y bajo en emisiones carbono”.
Naciones Unidas lleva así el centro de los debates sobre el cambio climático hasta su sede en Estados Unidos, país que abandonó el Acuerdo Climático de París de la mano de su actual presidente, Donald Trump.
El mes de marzo pasado, Guterres ya nombró al exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg como su enviado especial para Acción Climática y anunció que el multimillonario estadounidense apoyaría a la ONU en su estrategia para el clima y en la organización de la cumbre sobre este asunto en 2019.