Cada año, entre los meses de abril y mayo comienzan a arribar las primeras ballenas francas al área de cría y reproducción en Península Valdés. Las primeras en llegar suelen ser individuos solitarios como adultos, hembras preñadas y juveniles.
Más de mil ejemplares llegan cada año, provenientes de sus áreas de alimentación a las costas del Área Natural Protegida Península Valdés, en la provincia de Chubut.
Desde abril a diciembre estas aguas se convierten en el área de reproducción y cría de una de las poblaciones más grandes existentes de esta especie, en el hemisferio sur. Las hembras dan a luz y amamantan a sus crías. Otras vienen a destetar a las que nacieron el año anterior y a aparearse.
La concentración más elevada de individuos se observa entre agosto y septiembre, luego de producida la mayoría de los nacimientos. En octubre las ballenas comienzan a migrar hacia sus zonas de alimentación y ya para diciembre son muy pocas las ballenas que se observan en Península Valdés.