Mariano Sironi, director científico del Instituto de Conservación de Ballenas, contó que las primeras ballenas en la Patagonia argentina aparecen en abril y se van en diciembre.
Dónde se pueden avistar las ballenas en la Patagonia argentina
Durante el verano puede aparecer alguna, pero según los registros, en enero o febrero nunca se vio una ballena en la Península de Valdés, en el sur argentino.
Cuándo ver ballenas en la Patagonia argentina
“Siempre aparece alguna en marzo, pero normalmente las primeras que llegan en la etapa reproductiva llegan en abril”, definió Sironi a noticiasambientales.com.
En agosto, septiembre son los meses en los que se pueden encontrar una mayor presencia de ballenas en el sur argentino.
Hay 3 especies de ballenas francas:
- la ballena franca austral, que está en el hemisferio Sur y que es la que se ve en la Península de Valdés.
- La ballena franca que está en el hemisferio norte.
- y la ballena franca del Pacífico Norte.
Estas son especies que están creciendo, con la excepción de las que se encuentran en Chile y Perú, que está amenazadas por la cacería.
La ballena franca austral es una de las primeras grandes que se protegió porque se encontraba en peligro de extinción; a partir de ese momento se empezó a recuperar la población.
De las 50, 70 mil en el hemisferio sur hoy sólo quedan 15 mil ballenas francas en el Hemisferio Sur.
La ballena franca austral tiene una cría cada 3 años y tiene su primera cría, en promedio, a los 9 años.
“Uno de los requerimientos de una ballena hembra para quedar preñada es estar gorda: reproducir un ballenato y amamantar y transferirle toneladas de leche para que crezca es un esfuerzo energético muy grande”, reveló Sironi.
La unidad social principal de las ballenas francas es la hembra con su ballenato; esa relación estrecha dura un año, cumplido ese tiempo comienza su vida independiente. Es decir, todas estas ballenas saben quién es su madre, pero no su padre.
Las ballenas en la Patagonia en plena pandemia
Sironi consideró que las ballenas viven “en un mundo de sonidos”, por lo que la reducción de sonidos por la pandemia es una buena noticia para estos animales.