El cóndor que fue encontrado herido en un sector de chacras de Chos Malal, recibió un tratamiento con medicación específica traída desde Mendoza y tras su recuperación fue liberado en el Área Natural protegida Trómen.
Se informó que se lo liberó luego de recuperarse y ser controlado por un grupo de expertos que, durante este lapso redujo el contacto con el animal a lo estrictamente necesario para no perjudicar las chances de vuelta del cóndor a su entorno natural.
Este ejemplar había descendido a tierra el 15 de septiembre en un lugar cercado. De inmediato dieron aviso a Guardafaunas, sobrevino el rescate y el cóndor quedó al cuidado de Áreas Naturales Protegidas.
Los expertos detectaron que estaba afectado por una bradicardia, que es el descenso en la frecuencia cardíaca y que segregaba más saliva de lo habitual.
Además, este ejemplar macho de unos 20 años y un peso 11,600 kilogramos estaba golpeado en virtud de la brusca caída.
“Por estas horas está siendo atendido por el veterinario Alejandro González, de la Corporación para el Desarrollo de la Cuenca del Curí Leuvú (CORDECC)”, explicó Redondo.
“Se actuó de manera rápida y nos pusimos en contacto por video llamada con Vanesa Astore que es bióloga de la Fundación Bioandina, cuyos veterinarios son especialistas en rapaces y particularmente en cóndores”, contó Redondo.
Primero el animal reaccionó bien. Pero luego empezó a decaer y ante el decaimiento generalizado del ave y en concordancia con la opinión de los profesionales se presumió intoxicación con plomo.
Fue necesario cambiar de medicación y aplicarle cálcico disódico granulado, un producto que -según explicó- dejó de comercializarse pero que se sigue produciendo en un laboratorio que realiza trabajos para Bioandina. Para lograr que ese producto llegara a Neuquén fue necesario realizar gestiones ante la secretaría de Ambiente de Mendoza.
“Así fue posible que de Mendoza Capital sea llevado a Malargüe, luego a Barrancas y de ahí a Chos Malal”, dijo Redondo y destacó el trabajo tanto de los guarparques del área natural protegida El Trómen como del personal de Fauna de la regional Norte.
Esos esfuerzos coordinados apuntaron a que el cóndor se recupere y que pueda ser liberado en una zona alejada. También se tramitó la adquisición de otras dosis (en Buenos Aires), por si es necesario usarlas en futuras intervenciones.
A mediados de mayo último, un guardarpaque y un guardafauna lograron rescatar a otro cóndor, en este caso una hembra de un año, que no podía volar, porque tenía un ala fracturada. El animal fue rescatado en Cajón del Covunco y llevado a un santuario de Mendoza. Lamentablemente no podrá ser devuelto a su ambiente natural, ya que no puede volver a volar.