Las abejas son un tipo de insectos himenópteros. Su nombre científico es antófilo, y están ubicadas dentro de la superfamilia Apoidea. En el planeta existen más de 20,000 especies y su labor en el mundo es mucho más grande de lo que imaginas.
Las principales partes del cuerpo de las abejas son: cabeza, tórax y abdomen. Este antófilo es del tipo polinizador y cuenta con alas membranosas.
FUNCIÓN DE LAS ABEJAS EN EL MUNDO
La contribución que realizan al mundo es muy grande, ya que aportan al desarrollo sostenible y es por ese motivo que las Naciones Unidas declaró un día especial para crear concientización sobre estos insectos.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) anunció que el 75% de los cultivos a nivel mundial dependen de la polinización. Sin embargo, el indiscriminado uso de plaguicidas y el cambio climático, pueden llevar a la extinción del hábitat y especie.
La polinización se da debido a que estos antófilos tienen electrostática en sus cuerpos, lo cual hace que el polen se adhiera en ellos y así puedan transportar polen y semillas de un lugar a otro.
DATOS SOBRE LAS ABEJAS
– La abeja reina es la única que pone huevos. Vive de 5 a 6 años y pone 1,800 huevos al día en promedio. Cuando estas mueren, las hembras obreras eligen a la larva más joven (menos de tres días de vida) y la alimentan con “jalea real” para que esta se convierta en reina.
– De las más de 20,000 especies de abejas, solo 7 producen miel. Según algunos datos, la producción anual de miel en el occidente es de 1.6 millones de toneladas.
– Las margaritas son la mejor opción para las abejas, debido a que estas florecen casi todo el año.
– El trabajo de estos insectos polinizadores es extremadamente arduo. Para producir un kilo de miel tienen que hacer 4 millones de visitar a las flores. Durante un día logran visitar 7,000 flores.
– Se orientan con el sol y cuentan con una brújula interna a los movimientos solares.
– Las abejas únicamente pican cuando se sienten amenazas o tocadas de forma brusca. Esto significa la muerte para ellas, ya que al enterrar su aguijón deja parte de su tracto digestivo, músculos y nervios, lo cual les ocasiona la muerte.
EL RIESGO DE QUE DESAPAREZCAN LAS ABEJAS
¿Qué harías si un día desaparece tu fruta favorita y por más ansias que tengas de probarla otra vez no sea posible? Luego no existen más las flores, no puedes oler ni sentir de nuevo el girasol, el diente de león, la lavanda; de repente ya no ves mariposas, ni pájaros, ni los animales que comúnmente veías en tu camino diario. Aunque esto suene a ciencia ficción, es una realidad que podría ocurrir por la amenaza actual que se cierne sobre las abejas y otros polinizadores, y es que como especie humana dependemos de estos pequeños insectos.
Gerardo Ceballos, investigador en el Instituto de Ecología de la UNAM, afirma a Infobae México que si se pierden las abejas se pierde la capacidad de producir alimentos. En sus palabras: “Con la extinción de las abejas, y la extinción de las especies en general, estamos en una situación tan complicada que lo que pase en los siguientes 15 años va a determinar qué pasa con la humanidad y con la vida en la Tierra”.
El investigador menciona que las abejas son uno de los indicadores de cómo se encuentra el planeta. Según Ceballos, perder a tantos ejemplares y que se estén extinguiendo indica que estamos en serios problemas: “Es una llamada de atención de que después de las abejas siguen otros animales y después otros”.