En mayo de 2021 se conoció, gracias a imágenes provistas por satélites, que el desprendimiento de hielo de una gigantesca plataforma de hielo dio paso al iceberg más grande del mundo, con un área de 4.320 kilómetros cuadrados.
Un grupo de científicos del Instituto Nacional de Investigación del Agua y la Atmósfera de Nueva Zelanda (NIWA, por sus siglas en inglés), notó, gracias a esas imágenes satelitales, que la enorme plataforma de hielo, conocida como Larsen, tenía una ranura que les llamó la atención, ya que no era habitual.
Gracias al trabajo de campo, descubrieron que se trataba de un río subterráneo. Hace unos meses, iniciaron una profunda excavación para recabar más información sobre esta formación. Con ayuda de una manguera de agua caliente, perforaron 500 metros para observar lo que había bajo esta gran plataforma de hielo.
A través del delgado hueco que fueron abriendo, lanzaron una cámara. Como señala el comunicado del NIWA, allí observaron cosas que nunca antes se habían visto. Primero, pensaron que la cámara estaba defectuosa, pues solo veían parches. Sin embargo, tras unos minutos, identificaron que se trataba de unos pequeños animales que pasaban nadando a gran velocidad.
Los animales que observaban son los anfípodos, unos pequeños crustáceos cuya especie más grande, la Allicella gigantea, puede llegar a medir 34 centímetros. Hasta el momento, los científicos sospechaban que bajo estas gruesas plataformas de hielo, podían habitar distintos tipos de animales. Sin embargo, solo hasta ahora, cuentan con pruebas.
Craig Stevens, oceanógrafo físico del NIWA, dijo a través de un comunicado: “En un experimento normal, ver una de estas cosas te haría saltar de alegría. Nosotros estábamos inundados. Tener todos esos animales nadando alrededor de nuestra cámara significa que claramente hay un importante proceso ecosistémico que está ocurriendo allí”.
Más allá de las imágenes publicadas por el Instituto, no se tiene mayor información sobre las características del ecosistema, ni de los anfípodos que lo habitan. Stevens señaló que las investigaciones en esta región de la plataforma Larsen continúan a través de la toma de muestras de agua para ir identificando las propiedades del sistema.