La historia de la humanidad está marcada por migraciones a lo largo de sus diferentes épocas y que son comunes a todos los seres humanos del planeta. Las migraciones prehistóricas sean posiblemente el evento más característico y, aunque hayan pasado miles de años, en la actualidad seguimos presenciando migraciones de la población.
Estas migraciones actuales no tienen el mismo recorrido que las de hace miles de años, pero siguen formando parte de la vida de muchas personas. Entre todas estas migraciones de poblaciones hay una que destaca por encima de otras y es el éxodo hacia las ciudades, siendo más populares las que se encuentran cerca de la costa.
La posición de estas ciudades no es arbitraria y, es que, miles de años de civilizaciones han enseñado a la humanidad que la costa ofrece los recursos suficientes y necesarios como para poder establecer núcleos de población. Pero al encontrarnos actualmente en sociedades avanzadas ¿por qué esto se sigue repitiendo?
Existen muchas respuestas para esta pregunta y todas ellas llegan de personas que estudian el comportamiento humano. La semilla de esta movilización de la población se sembró durante la Revolución Industrial y sigue creciendo hasta ahora. Viendo que la situación no va a cambiar, vamos a ver cómo se distribuye la densidad de población en el mundo.
El éxodo de la población representado en un mapa global
La Revolución Industrial marcó un antes y un después en las sociedades modernas haciendo que se acelerase el éxodo rural. Adolescentes y adultos jóvenes se embarcaron en un viaje para dejar la población rural atrás. La ciudad se convirtió en el lugar en el que había que estar y sin que esto cambie a día de hoy.
El mapa global que ha sido creado por Alasdair Rae utiliza los datos de la herramienta de la Unión Europea llamada GHSL o Global Human Settlement Layer que se entiende como un instrumento que ofrece información para conocer cómo se ha establecido el ser humano en los últimos años. Gracias a estos datos se ha podido crear este mapa tan visual.
A simple vista lo que se puede ver en este mapa confirma varios análisis que se han hecho a lo largo de los años. La población se reúne casi en su totalidad en la costa, haciendo que el gráfico muestre torres de enorme tamaño cerca de los océanos. Vamos a tomar la Península Ibérica como ejemplo a la hora de hacer comentarios.
La mayor parte de la población en el caso de Portugal se encuentra en la zona costera, siendo discernible dos núcleos grandes que, al menos por lo que se puede ver en el mapa, corresponderían con Lisboa y la zona más cercana Faro. Al pasar a España lo que nos encontramos es que en Galicia la población se encontraría concentrada en el norte.
No se puede distinguir demasiado bien, aunque está claro que se trata de la provincia de A Coruña. Lógicamente, Madrid es otro punto caliente y lo mismo ocurre con Barcelona o Sevilla. Pero lo que resulta interesante es que en comunidades como Castilla y Leon, Extremadura, Murcia, La Rioja o Castilla-La Mancha tiene una densidad de población mínima.
A lo largo de Europa ocurre lo mismo, siendo Reino Unido una de las pocas excepciones debido a que son varias islas y cuentan con una densidad de población enorme. Si vamos hacia el este la situación se agrava al llegar a Rusia que, debido a su extensión, es imposible de llenar por completo y hay lugares con densidades mínimas de población.
De hecho, gran parte de Rusia carece de población formando un enorme vacío en el mapa. Además, contrasta enormemente con la India o con la parte de costa de China. Y, es que, a China le ocurre lo mismo que a Rusia: su población se encuentra concentrada en puntos definidos y dejando vacía buena parte de su extensión.
La India es el único elemento del mapa de que destaca de por encima del resto. En toda o prácticamente toda su extensión encontramos torres que indican que hay una enorme densidad de población. Sí, era esperable teniendo en cuenta que cuenta con una población de 1.393 miles de millones de personas.
Siguiendo por esta zona pasamos a Japón que pese a ser una isla deja claro que en su poca extensión cuenta con una enorme cantidad de personas viviendo. Todo lo contrario a lo que ocurre en Australia, siendo este un país que con una enorme extensión y cuya su población se concentra en la costa que agrupa a Melbourne, Sydney y varias ciudades más.
Cruzamos el Océano Pacifico para llegar a América. La situación se repite de nuevo y todos los núcleos grandes de población se encuentran en la costa. En Canadá y Estados Unidos encontramos un enorme vacío en la zona central que también se ve reflejada en los países de Sudamérica como Bolivia, Paraguay, Brasil y Argentina.
Está claro que este mapa es uno de los más curiosos que hemos visto hasta ahora y, aunque no esté centrado en España y en sus pueblos, resulta muy interesante ver cómo se distribuye la población en todos los países del mundo. Además, deja claro que la costa es el punto caliente en el que se concentra la población.
