‘Nosotros ahora estamos haciendo una obra complementaria que sería el retorno del paseo superior, y que va a permitir sumar un nuevo paisaje al sistema de cataratas que son las islas del Iguazú superior’, contó a Télam el intendente del Parque Nacional, Juan Sergio Bikauskas.
El funcionario de la Administración de Parques Nacionales (APN) explicó que esta nueva realidad permitirá que una vez que los turistas recorran todos los saltos, como el Dos Hermanas, el Bossetti y el M’Biguá, el retorno se proyecte hasta el salto San Martín, el segundo con mayor altura y en volumen de agua de todo el sistema.
‘Esta manera de ver ese salto, que no se lo puede observar por completo desde Brasil porque lo tapa la isla San Martín, hace que Argentina tenga la mejor visión de los dos saltos más imponentes; la Garganta del Diablo y el salto San Martín’, precisó.
Bikauskas expresó que se trabaja en la idea de un diseño de balcón que permita acercarse al borde del salto. ‘Estamos pensando en un balcón con forma de herradura -en cemento- y que acceda permitir ver el salto San Martín en un lateral, y todo el sistema de saltos hacia la izquierda’, remarcó.
Con esta obra se va a lograr un distribuidor del flujo turístico que permitirá al visitante un retorno por casi 900 metros de pasarelas por las islas, que no están actualmente representadas en el sistema.
‘Se nos vienen una nueva realidad turística, es decir, el visitante en la actualidad quiere tener una vivencia más fuerte del ecosistema y de los procesos ambientales asociados a las cataratas, y de esta forma los va a ver in situ’, precisó Bikauskas.
Por su parte, el ingeniero Facundo Gulino, a cargo de la coordinación de la obra del circuito superior, explicó a Télam que se está en un 70% del avance del trabajo -que sufrió un retraso por la última creciente-, restando sólo un 5% de definición de obra que abarca la salida y parte del mirador San Martín.
Las obras se dividen en tres ejes: desde el salto M’Biguá hasta el distribuidor; desde el salto San Martín hasta el distribuidor; y desde la salida hasta también el distribuidor.
‘Al trabajar en conjunto con Parques Nacionales, en toda la obra la traza del circuito se fueron cuidando todos los recursos naturales, porque el ecosistema o el microecosistema que tenemos en este sector no se vuelve a repetir. No son islas establecidas sino que se van generando con los sedimentos’, relató.
‘Cada árbol se lo cataloga y se lo protege. Nosotros los de la concesionaria somos los visitantes, siempre con la intención de proteger el medio. Nosotros marcamos por donde irían los tramos y los técnicos de parques revisan y redireccionan si hay que hacerlo’, precisó.
Dio el ejemplo de una planta endémica que solo crece en ese sector, y en ningún otro lugar del parque, la coussarea, que condicionó la posición de los pilares para protegerlas.
Los visitantes tendrán así la posibilidad de conocer las entrañas del río Iguazú antes de los saltos, que justamente es lo que va modificando esos saltos a medida que hay crecientes o bajadas y que el turista no tiene oportunidad de observar.
El murmullo del correr del agua, con el bramido de fondo de las cataratas, sumado a los diferentes aromas y colores, harán de este nuevo tramo del circuito superior un deleite para los sentidos, forjando aún más el valor vivencial que tienen las cataratas del lado argentino.
‘Este circuito brinda un paisaje totalmente diferente a lo ya visto porque el visitante siempre ve los saltos de frente, de costado, de arriba, de Brasil con su panorámica, pero en esto van a ver la antesala, siendo uno de los recorridos más lindos, que templa el espíritu. Es un paseo por la selva, sus aromas y sonidos’, destacó.
La idea prevista es que el mirador San Martín tenga 3 niveles: se podrá ver desde la isla; desde una posición más baja; y acercándose al salto, con una diferencia de nivel de 1,80 a 2 metros, que va a ser única en todo el parque.