Las abejas no solo son miembros importantes para el ecosistema, sino también para sus propias colonias. Pero no solo se destacan por su miel y beneficios para el medioambiente, también llaman la atención por la organización de sus nidos. Estos insectos tienen la capacidad de construir paneles doble cara con una simetría increíble y precisa, en la que cada celda, siendo un reflejo exacto en el otro.
De acuerdo con el estudio publicado en sitio especializado Current Biology, demostró que la estructura de los nidos es una respuesta a señales térmicas, la cual funcionan como guías en la creación de estas estructuras.
Para profundizar en este extraño comportamiento, los científicos del Smith Bee Lab de la Universidad de Auburn estudiaron a las abejas utilizando colmenas transparentes. Luego de varios experimentos, los investigadores pudieron realizar varios mapas detallados de los nidos, además de que documentaron la forma en que las abejas replican el contenido de un lado del panal en el lado opuesto.
Por otra parte, los investigadores descubrieron que las abejas pueden establecer esta disposición simétrica sin necesidad de estar en contacto directo con otras colonias, sólo aislando dos grupos diferentes que lograron replicar la misma distribución en sus nidos. Así fue como descubrieron que el calor tenía un papel crucial en la organización simétrica.
Las ventajas de la asimetría de los nidos
Esta estructura simétrica no solo resulta estéticamente armonía, sino que además es fundamental para la supervivencia y el crecimiento de las colonias. Esto se debe a que los nidos de doble cara permiten un entorno térmico más estable, lo que es clave para el desarrollo de las crías.
Por otra parte, esta disposición ayuda al crecimiento acelerado de la colonia, ya que se probó que las colonias con doble paneles producen un 60% más de cría en un periodo de diez días en comparación con aquellas que no las tienen.
Estos beneficios no son más que el resultado de la eficiencia en la distribución de sus recursos más importantes, el polen y la miel, que son almacenadas en secciones espejadas para optimizar el acceso y su uso.
Una capacidad natural
De acuerdo con los expertos, la capacidad de las abejas para construir los paneles simétricos pudo haber sido adquirida naturalmente. Esto se debe a que el diseño de doble cara les permite adaptarse mejor a los diferentes entornos y aprovechar de forma óptima los recursos internos, maximizando la supervivencia y reproducción de la colonia.
Este comportamiento arquitectónico no es exclusiva de una sola especie de abeja, sino que también la tienen varias especies del género Apis, lo que sugiere que este rasgo es fundamental en las abejas melíferas. Este descubrimiento reveló que estos insectos tienen implicaciones profundas para la conservación de estas especies esenciales en el ecosistema.
La creación de hábitats que respeten la arquitectura natural de los nidos de las abejas ayuda a minimizar las alteraciones humanas, mientras garantiza el acceso a fuentes florales adecuadas, que favorecerían su supervivencia y estabilidad de sus poblaciones.
¿Ya conoces nuestro canal de YouTube? ¡Suscríbete!