Diez especies de mamíferos, entre los que se destacan el zorro colorado, el hurón, el puma, chinchillones, cuices, aves y guanacos han incrementado su presencia en el parque provincial Cordón del Plata,
lo que las autoridades adjudican a a la presencia permanente durante siete años de guardaparques y la puesta en marcha de la Ley de Áreas Protegidas.
‘Tras ocho años de estar amparados por la Ley de Áreas Protegidas y siete años con presencia permanente de guardaparques, grupos de fauna silvestre volvieron a habitar esta vía de acceso al circuito del Valle de Uco, tras muchos años de haber recibido la presión de la caza y captura para el comercio ilegal’, explicaron en el área de Medio Ambiente.
Se trata del ecosistema de esta área natural protegida, donde ya pueden avistar alrededor de diez especies de mamíferos, más de 70 especies de aves y otros animales como sapos, lagartos y diferentes clases de insectos.
El Parque Provincial Cordón del Plata está ubicado entre las localidades de Tupungato y Potrerillos.
La ruta, llamada también camino de Los Cerrillos, pertenece al Sistema de Áreas Naturales Protegidas de la provincia de Mendoza, gestionadas por la Dirección de Recursos Naturales Renovables de la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial.
‘Hemos detectado el aumento de diez especies de mamíferos entre los que se destacan el zorro colorado, el,hurón, el puma, Chinchillón, cuices y manadas de hasta 130 guanacos’, comentó a Télam Sebastian Melchor, director de Recursos Naturales.
Entre las aves, se destacan el pato de torrente, el picaflor cometa, chorlito de vincha, cóndor andino, tucuquere, entre tantas otras que sobrevuelan hoy recursos hídricos protegidos como glaciares, vegas y arroyos que desembocan en el dique Potrerillos.
En el área de Medio Ambiente destacaron que ‘la presencia de Guardaparques permite hoy la concientización a través de la educación ambiental, como así también el control y fiscalización de cacerías furtivas, trampeo de aves, extracción de flora y el manejo de residuos sólidos’.
En los últimos años se promovió la conectividad ecológica para la conservación de la naturaleza, dado que la fragmentación del paisaje es una de las principales causas de la pérdida de funcionalidad de los sistemas y de declive de la diversidad biológica.
‘Es por eso que estas acciones tienen como objetivo generar un corredor biológico de alta montaña, comprendido por Áreas Naturales Protegidas desde Malargüe hasta el límite con San Juan’, explicaron.
La conformación de este corredor sumó 138.000 hectáreas pertenecientes a la zona de El Sosneado, lo que permite generar una unión entre las reservas Laguna del Atuel y Laguna del Diamante, sumándolas al corredor que ya comprenden con las Áreas Naturales Protegidas de Volcán Tupungato, Manzano Histórico-Portillo Piuquenes, Aconcagua y Villavicencio.